EL EXPOLIO DE LA CIUDAD

 

 

Durante la Antigüedad tardía, los edificios públicos de las ciudades en Hispania cayeron en desuso y comenzaron a ser amortizados. El debilitamiento de la administración y las instituciones locales, unido a las nuevas necesidades de los ciudadanos, provocó que se reutilizaran los espacios públicos y sus materiales constructivos para construir nuevas estructuras. Complutum no fue una excepción.

La ciudad de Complutum es un ejemplo más de ciudad amortizada para la construcción de nuevos edificios en otros emplazamientos, como el Campo Laudable o el castillo musulmán de ‘Alcalá la Vieja’.

Se sabe que la ciudad fue abandonada entre los siglos IV y V d.C. Gran parte de sus edificios fueron desmontados para recuperar sus materiales de construcción. En la antigüedad, no era algo extraño, ya que tras el abandono de las ciudades y el derrumbe de sus edificios, los materiales que se podían reutilizar eran recuperados y vendidos de nuevo.

Ejemplo de la reutilización de materiales para la construcción tanto del torreón de la Fuente del Palacio Arzobispal como del torreón de Tenorio

 

En los siglos XVII, XVIII y XIX, el yacimiento fue objeto de una intensa actividad arqueológica concebida para el coleccionismo. El resultado de esta actividad dejó a la vista grandes zanjas de expolio que los arqueólogos siguen encontrando actualmente.

Zanja de expolio en la Casa de los Grifos
Zanja de expolio en la Casa de los Grifos

 

La huella que Complutum ha dejado en Alcalá de Henares es visible aún en el siglo XXI en lugares como la Catedral Magistral, donde se pueden identificar tambores de columna, sillares tallados y piezas singulares.

Entre ellas destacan una cupa funeraria y varios epitafios de los que aún se conservan sus inscripciones.

Además de las huellas visibles en la ciudad, existen referencias escritas sobre el aprovechamiento de los materiales de Complutum. Así, en los Annales Complutenses, se describe cómo los árabes destruyeron Complutum para fortalecer con sus ruinas el castillo de Alcalá la Vieja:

La fortificaron los moros con piedras y otros materiales que del despojo de los edificios de la ciudad de Compluto subieron a ella”.

Annales Complutenses.